La Nueva Escuela Mexicana (NEM) ha traído consigo cambios fundamentales en la organización escolar y la práctica educativa. Uno de los pilares más importantes para la implementación de esta transformación es el Consejo Técnico Escolar (CTE), que se ha consolidado como un espacio clave para el desarrollo profesional docente y la mejora continua de las escuelas. En esta primera sesión del CTE del ciclo escolar 2024-2025, es necesario reflexionar sobre los avances alcanzados, los retos que aún persisten y los próximos pasos que se deben dar para fortalecer la educación en México.
Avances de los Consejos Técnicos Escolares y la Nueva Escuela Mexicana
A lo largo de los últimos años, los Consejos Técnicos Escolares han evolucionado de ser simples espacios de planeación técnica a convertirse en auténticos foros de diálogo pedagógico y reflexión crítica sobre la práctica docente. Esta evolución es uno de los avances más notables, ya que ahora los docentes no solo discuten sobre los contenidos curriculares, sino también sobre las condiciones que afectan el aprendizaje de los estudiantes.
La Nueva Escuela Mexicana ha promovido un enfoque en el que la educación se concibe como un derecho humano fundamental, por lo que los CTE han jugado un papel crucial en la construcción de una escuela más justa, equitativa, inclusiva y solidaria. El diálogo horizontal en el CTE, que implica una relación de igualdad entre los docentes y los directivos, ha permitido que las decisiones sean más democráticas y que las voces de todos los actores educativos sean escuchadas y valoradas. Este diálogo es esencial para fomentar la autonomía profesional de los maestros, quienes, desde su conocimiento y experiencia, son capaces de tomar decisiones informadas sobre la mejor manera de atender las necesidades de sus alumnos.
Un avance clave ha sido la incorporación de la formación situada, un enfoque que busca que la intervención de los docentes sea contextualizada y vinculada a la realidad de cada escuela. Esto significa que los problemas y desafíos que enfrentan los maestros en sus aulas se convierten en el punto de partida para su desarrollo profesional, lo que ha fortalecido la pertinencia y eficacia de las acciones formativas.
El Proceso de Mejora Continua en la Escuela Pública ha avanzado significativamente al integrar prácticas más colaborativas y centradas en el aprendizaje integral de los estudiantes. Entre los logros destacan la mayor participación docente en la toma de decisiones y el uso de datos para ajustar estrategias pedagógicas de su programa analítico.
¿Cuál es el significado de las funciones directivas y docentes en la Nueva Escuela Mexicana?
El nuevo significado de las funciones directivas y docentes en la Nueva Escuela Mexicana se ha centrado en la colaboración y la corresponsabilidad. En lugar de un enfoque jerárquico y autoritario, la NEM promueve un liderazgo directivo que acompaña, guía y apoya a los docentes en su labor cotidiana, reconociendo su autonomía profesional y fomentando un ambiente de trabajo colegiado. Los directores no son simplemente figuras de autoridad, sino facilitadores del aprendizaje, que crean las condiciones necesarias para que los maestros puedan llevar a cabo su trabajo de manera efectiva.
Por su parte, los docentes asumen un rol más proactivo y autónomo en la toma de decisiones pedagógicas, con la confianza de que sus juicios profesionales son valiosos y respaldados por el liderazgo directivo. Este nuevo concepto de las funciones directivas y docentes es uno de los grandes logros de la NEM, ya que ha generado una cultura de colaboración y confianza que impacta directamente en la calidad educativa.
Retos de la Autonomía Profesional, la Formación Situada y el Diálogo Pedagógico
A pesar de los avances, la implementación plena de la autonomía profesional sigue siendo un reto. Gran parte de los docentes aún enfrentan dificultades para ejercer plenamente su autonomía debido a factores como la falta de recursos, la sobrecarga administrativa y las políticas educativas cambiantes. En algunos casos, el rol directivo sigue manteniendo una relación jerárquica que obstaculiza el diálogo horizontal y la toma de decisiones conjunta.
El reto principal en términos de formación situada radica en asegurar que todos los maestros tengan acceso a oportunidades de desarrollo profesional que sean realmente contextualizadas. La formación genérica no siempre responde a las necesidades específicas de cada escuela y comunidad, por lo que se requiere un mayor esfuerzo por personalizar y adaptar los programas de capacitación.
El diálogo pedagógico es otro desafío, ya que implica que los maestros y directores deben estar dispuestos a cuestionar sus propias prácticas y a abrirse a nuevas ideas. Sin embargo, en múltiples casos, los CTE aún se ven como espacios más burocráticos y menos educativos donde se cumplen procedimientos sin una reflexión profunda sobre la enseñanza. Cambiar esta percepción y fomentar una cultura de reflexión crítica es un desafío que debe enfrentarse de manera consciente y decidida.
¿Qué es el diálogo horizontal en el CTE de la Nueva Escuela Mexicana?
El diálogo horizontal en el CTE es un proceso de comunicación entre iguales, donde las voces de todos los participantes, ya sean directores, maestros o personal de apoyo, tienen el mismo peso en la toma de decisiones. A diferencia de las formas tradicionales de liderazgo escolar, donde las decisiones son impuestas de arriba hacia abajo, el diálogo horizontal busca construir acuerdos a través del intercambio de experiencias, conocimientos y perspectivas. Este enfoque es fundamental para que el CTE funcione como un espacio de crecimiento colectivo, donde las soluciones a los problemas educativos se construyen de manera colaborativa.
Condiciones de Realización del CTE: Limitaciones y Potencialidades
Las condiciones de realización del CTE varían enormemente dependiendo de factores como la infraestructura escolar, la conectividad tecnológica, el tiempo disponible y el apoyo institucional. En la mayoría de las escuelas, especialmente en zonas rurales o marginadas, los CTE enfrentan limitaciones materiales que dificultan su funcionamiento. La falta de recursos tecnológicos, el tiempo reducido para las reuniones y la sobrecarga de tareas administrativas son algunos de los obstáculos que limitan la efectividad del CTE.
No obstante, el potencial del CTE es enorme cuando se crean las condiciones adecuadas para su funcionamiento. En escuelas donde el liderazgo es colaborativo y el diálogo pedagógico es una práctica habitual, los CTE se convierten en verdaderos motores de cambio, donde se diseñan e implementan estrategias innovadoras para mejorar el proceso de enseñanza - aprendizaje.
¿Cuáles son las alternativas para apoyar y fortalecer el diagnóstico socioeducativo de las escuelas a cargo de directores?
Una de las estrategias más efectivas para fortalecer el diagnóstico socioeducativo de las escuelas es la implementación de herramientas de evaluación que consideren tanto los aspectos cuantitativos como cualitativos de la realidad escolar. Los directores pueden utilizar encuestas, entrevistas y observaciones para obtener una visión integral de las condiciones en las que se desarrolla el proceso educativo.
Otra alternativa es la creación de redes de apoyo entre escuelas, donde los directores y maestros compartan experiencias, buenas prácticas y soluciones a problemas comunes. Estas redes no solo permiten un intercambio de conocimientos, sino que también refuerzan la sensación de comunidad y colaboración entre las escuelas, fortaleciendo el diagnóstico y la toma de decisiones.
Retos y Oportunidades de la Escuela Mexicana en el Marco de la NEM
Uno de los grandes retos de la escuela mexicana en el marco de la NEM es lograr que la práctica educativa sea verdaderamente inclusiva y equitativa. A pesar de los avances normativos, la realidad en numerosas escuelas es que los estudiantes más vulnerables continúan enfrentando barreras para el aprendizaje y la participación en el sistema educativo. Las escuelas deben trabajar en la eliminación de estas barreras y en la creación de un entorno donde todos los estudiantes, independientemente de su origen socioeconómico o cultural, tengan las mismas oportunidades de aprender.
La justicia educativa es otro reto fundamental. Esto implica no solo asegurar el acceso a la educación, sino también garantizar que la calidad de la enseñanza sea equitativa en todas las regiones del país. Las disparidades entre las escuelas urbanas y rurales siguen siendo significativas, y es responsabilidad del sistema educativo cerrar estas brechas.
La Primera Sesión del CTE de septiembre 2024 debe abordar el error de la Nueva Escuela Mexicana: el suponer que los maestros ya estaban completamente preparados para implementar los cambios estructurales. Este desacierto subestimó la necesidad de formación continua, ya que un número considerable de docentes enfrentaron dificultades para adaptarse a las nuevas metodologías y enfoques pedagógicos. El nuevo planteamiento de la educación tendrá la obligación de corregir esta brecha, enfocándose en el desarrollo profesional docente con revalorización y con procesos de ascensos y cambios de adscripción que eviten los vicios tradicionales de la burocracia educativa, para garantizar que la visión de la NEM se traduzca en una práctica educativa justa, efectiva y acorde a las necesidades actuales.
¿Cuáles son los retos de la escuela mexicana y la práctica educativa en el marco de la escuela justa, equitativa, inclusiva y solidaria?
El principal reto de la escuela justa y equitativa es asegurar que todos los estudiantes reciban una educación de calidad, sin importar su contexto escolar. Esto implica la formación continua de los docentes en prácticas inclusivas, el diseño de materiales didácticos accesibles y la creación de entornos de aprendizaje que respeten y valoren la diversidad cultural y lingüística de los estudiantes. Además, se deben redoblar los esfuerzos para garantizar que las escuelas inclusivas cuenten con los recursos necesarios para atender a estudiantes con necesidades educativas especiales.
Próximos Pasos de la Nueva Escuela Mexicana en la Reciente Administración
De cara al futuro, los próximos pasos de la Nueva Escuela Mexicana deben centrarse en consolidar los avances logrados hasta ahora y en abordar los desafíos que aún persisten. Uno de los principales focos de atención debe ser la evaluación continua de los programas y políticas implementadas, asegurando que las decisiones se basen en evidencia y en un diálogo abierto con los actores educativos.
La falta de capacitación a profesores seguirá siendo un reto, esta tendrá que ser con un enfoque en el desarrollo de competencias que permitan a los maestros adaptarse a los cambios sociales y tecnológicos que afectan la educación. Además, es una obligación fortalecer el acompañamiento a los directivos, proporcionándoles herramientas y recursos para que puedan ejercer un liderazgo transformador en sus comunidades escolares.
Conclusiones
La primera sesión del CTE 2024-2025 marca un momento clave para reflexionar sobre los avances alcanzados y los retos que enfrenta la educación en México en el marco de la Nueva Escuela Mexicana. Los Consejos Técnicos Escolares, como espacios de diálogo y reflexión, tienen el potencial de ser verdaderos motores de cambio si se crean las condiciones adecuadas para su funcionamiento.
La autonomía profesional, la formación situada y el diálogo horizontal son elementos esenciales para mejorar la calidad educativa, pero su implementación requiere de un esfuerzo conjunto por parte de maestros, directivos y autoridades educativas. Los próximos pasos deben centrarse en fortalecer la colaboración, la formación continua y el acompañamiento, asegurando que todos los estudiantes tengan acceso a una educación justa, equitativa, inclusiva y solidaria.
Ahora que conoces más sobre la Primera Sesión Ordinaria del Consejo Técnico Escolar; te invito a adaptar estos conceptos a tu práctica docente.
¡Un abrazo! 🚀
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